Celebrante: Bendita es ella quien confió en las promesas del Señor. Así como María,
confiemos que El escuchará nuestras peticiones.
Diácono/Lector:
Para que la Iglesia, como la Virgen María, traiga a Cristo al mundo con gozo, y esté unida por siempre a El, roguemos al Señor...
Para que la Asunción de María recuerde a los líderes gubernamentales la dignidad suprema de cada vida humana, llamada a las Alturas de la Gloria Celestial, roguemos al Señor...
Por todas las madres, para que encuentren en María el ejemplo y la fuerza para llevar a cabo su vocación, roguemos al Señor …
Para que los enfermos reciban fuerza, consuelo, y sanación al ir a María, quien intercede por nosotros desde el Cielo, roguemos al Señor...
Para que todos los que sufren por la muerte de un ser querido reciban fuerza y consuelo en esta Fiesta de la Asunción y encuentren esperanza renovada en la promesa de la resurrección, roguemos al Señor...
Celebrante:
Padre,
al llevar a María en cuerpo y alma
a la Gloria Celestial,
Nos has dado una nueva esperanza.
Haz que nunca dudemos
que Tu escuchas y respondes a nuestras súplicas,
por Cristo nuestro Señor. Amén.