"Todo llamado en favor de los derechos humanos es una ilusión si se ataca el
derecho a la vida" (Obispos de los EU, Faithful Citizenship, 1999)
¿Qué pasaría si le dijeran que todos sus derechos están garantizados y
asegurados, excepto su derecho a la vida? ¿No sería esto una promesa falsa?
Después de todo, nuestros derechos no sirven de nada si no estamos vivos para
disfrutarlos.
Éste es el problema con los candidatos que parecen buenos
porque promueven todos los derechos, pero impiden que los niños nazcan
privándoles así el poder disfrutar de esos derechos. Ése es el problema de la
mentalidad "pro-aborto". Escoger terminar con la vida de un bebé por medio del
aborto es negarle a ese bebé todos sus derechos presentes y futuros.
El gobierno no tiene autoridad para hacer esto. Por el
contrario, el gobierno existe para garantizar los derechos del pueblo.
Algunos candidatos dicen no saber cuando comienza la vida. ¿Quiere decir esto,
que si ellos van un día de casería y ven algo que se mueve detrás de un arbusto,
le disparan sin cerciorarse primero si se trata de un animal o un hombre? De no
ser así, entonces, ¿por qué justifican el aborto sin estar seguros de qué es lo
que están destruyendo?
Tenemos la responsabilidad moral de votar. No hay ningún
candidato perfecto, pero las elecciones de éste año pueden acercar más a nuestra
nación a la santidad moral con respecto a éste tema. Cuando usted vote,
asegúrese que conoce la opinión de sus candidatos acerca del aborto, "el tema de
los derechos humanos es fundamental para todo hombre y mujer de buena voluntad"
(Obispos de los EU, Resolución sobre el Aborto, 1989)