Oh, María, Eres la Puerta del Cielo. Siempre nos llevas a Jesús el Señor, el que es la vida eterna.
Hoy rezamos por todos los que han muerto de aborto.
Estos niños fueron planeados desde la eternidad y traído a existencia por el amor infinito de Dios. A través del pecado del aborto, no se les permitió vivir su vocación o cumplir con el plan que el Señor había preparado para ellos.
Confiamos en su infinita misericordia y poder y por lo tanto, con cierta esperanza confiamos a estos niños al Padre y te pedimos que también los abraces con el manto de tu intercesión.
Da esperanza y consuelo a sus madres, padres y abuelos que lloran por sus muertes.
Oramos, oh Puerta del Cielo, por todas las madres que murieron por sus abortos, las que entraron en los centros de aborto, y nunca salieron.
Intercede por ellas, que Dios tenga piedad.
Bendice nuestro trabajo de poner fin al aborto, y permítenos señalarte a todas las personas, a Jesús, con quien estás unido en el cielo, para siempre jamás. Amén.