Madre amorosa de nuestro Redentor, Estás llamado en todo el mundo el refugio de pecadores.
A ti los desesperados vienen, como a una madre quien proporciona un refugio amoroso, cuando tienen miedo de venir a alguien más.
María, hoy rezamos, y te pedimos interceda por todos los que están abrumados por el pecado del aborto, y temen no pueder encontrar el perdón.
Eres el refugio de los pecadores porque has dado al mundo el que destruyó el pecado, el único mediador entre nosotros y Dios, Jesucristo.
Oramos hoy, ayudanos acercar más a él, inspira a todos los que han cometido el pecado del aborto, a retornar a él, que por sus heridas nos sana.
María, que pecadores se refugien en ti, desde el poder opresivo de la desesperación, del poder confuso de la falsedad, y del poder destructivo de la violencia.
María, que todos encuentren refugio en ti, cuando rechazan la mentira del aborto, el abuso de la libertad, la perversión de los derechos humanos, y la visión falsa de los derechos de las mujeres.
A través de tu ayuda, Refugio de Pecadores y Madre del Redentor, que el pecado de cualquier tipo de complicidad en el aborto sea lavado por el océano de la misericordia de Jesucristo, que murió por nosotros.
A través de tu presencia, supera la soledad que ha causado el aborto y trae a los que son culpables a la paz de comunión contigo y con todos los santos, mientras todos adoramos juntos El Cordero que fue asesinado por nosotros y cuya sangre nos redime a Dios, Jesucristo, que vive y reina por siempre jamás. Amén.
¡Refugio de pecadores, reza por nosotros!