Venerable Anita murió en 1941 a los 17. Cuando tenía 13 años, ella escucho a su madre rogarle, “Es un grave pecado contra el Cielo y contra tu infante--- ¡no debes matarlo!” Esto no obstante, fue hasta más tarde mientras hacía reparaciones por los abortos, que ella regreso al Señor en oración ferverosa por la maldad que se reveló en su persona. Por los siguientes 4 años, mientras ella yacía muriendo de tuberculosis, ofrecía sus sufrimientos y su vida por la causa de los niños asesinados en el vientre.
Señor vivimos en la sombra de muerte
Nosotros, Tu gente, debidamente somos horrorizado
Por la tragedia en curso del aborto
Señor, quebraste el corazón
De piedra de la Venerable Anita
Cuando escucho la voz de su madre
Y después descubrió la maldad que es el aborto
Te agradecemos, O Dios
Quien por Tu Espíritu Santo
Inspiras a Tu gente de vida
Hacer reparación por el crimen indecible
De matar a los niños inocentes
Te agradecemos la pura y hermosa alma
De la Venerable Anita
Quien, al sufrir los últimos años de su vida joven
Que se ofreció por los más pequeñitos hermanos
Que son los niños en el vientre
Danos, Señor, ese mismo espíritu de solidaridad con ellos
Y de reparación por el pecado en curso del aborto
Protege a todas las madres, padres, abuelos, y amigos
De la tentación de sugerir, recomendar o de forzar alguien en abortar
Por el ejemplo de la Venerable Anita
Permítenos servir a los más débiles entre nosotros
Y poder proclamar que en Ti, todas las vidas son llamadas a florecer
Quí en la tierra y por siempre en el Cielo.
Te lo rogamos en El Nombre de Jesús, el Señor. Amén.